Conoce como aliviarlos con Actron® Pediátrico.
En algunas situaciones, ante la aparición de dolor y/o inflamación, es necesario el tratamiento con analgésicos y antiinflamatorios para aliviarlo
El Ibuprofeno tiene efecto analgésico y antiinflamatorio, siendo esta última propiedad lo que lo hace particularmente útil en dolores con características inflamatorias.
Es importante hacer la consulta con el pediatra, ya que, para aliviar el dolor, la inflamación y/o la fiebre pueden indicarse analgésicos y antinflamatorios como el Ibuprofeno
OTITIS
Es una inflamación del oído medio, generalmente causada por una bacteria.
Ocurre cuando se acumula líquido detrás del tímpano y, en la mayoría de los casos, se presentan cuando los niños todavía no saben hablar.
Si tu hijo no puede aún decir “me duele el oído”, podés observar los siguientes signos:
Se lleva la mano a la(s) oreja(s) y tira de ella(s)
Se siente molesto y llora
Tiene problemas para dormir
Tiene fiebre (especialmente en bebés y en niños pequeños)
Sale líquido del oído
Generalmente es causada por una bacteria y frecuentemente comienza después de que el niño tiene una infección de garganta, resfriado o catarro u otra infección de las vías respiratorias altas.
“Otitis del nadador” u otitis externa
Es una infección de la piel del interior del conducto auditivo o del oído externo. Se produce después de nadar o de otras actividades que permiten la entrada de agua en los oídos.
Se desarrolla porque la humedad en el canal auditivo favorece el crecimiento de ciertas bacterias. La humedad también hace que la piel que recubre el conducto auditivo se reblandezca. Las bacterias invaden la piel reblandecida y se multiplican allí, provocando esta infección, a menudo dolorosa.
Los niños pueden manifestar picazón en la zona afectada o una sensación de taponamiento en el oído.
Si tu hijo es demasiado pequeño para decirte lo que le duele, podes notar que se mete el dedo en la oreja o se la frota con la mano. En algunas ocasiones, también pueden tener fiebre. La entrada del canal auditivo puede hincharse y enrojecerse, provocando dolor.
¿Cómo se previene?
Limitar la permanencia en el agua a menos de una hora si es posible.
Cuando salga de nadar o jugar en la pileta, quitar el exceso de agua de su oído con la esquina de una toalla o hacer que sacuda la cabeza.
DOLOR DENTAL
CARIES
La caries dental es el daño de un diente cuando las bacterias que causan caries que se encuentran en la boca producen ácidos que atacan la superficie del diente o esmalte. Esto puede provocar un pequeño agujero en el diente, al que se le llama caries.
Los niños, pueden experimentar dolor debido a estas lesiones dentales.
¿Cómo prevenirlas?
Amamantar al niño, porque contribuye al desarrollo normal de los maxilares.
No colocar miel ni otro endulzante en el chupete, tetinas ni en las encías.
Llevar al niño al odontólogo con la aparición del primer diente de leche.
Limpiar los dientes del bebé con un paño o gasa después de cada comida.
El uso del cepillo debe ser personal y no compartirse.
El Flúor previene las caries.
El cepillado más importante es el que se realiza por la noche.
Los aparatos de ortodoncia no producen caries, pero sí favorecen la retención de alimentos. Deben estar siempre limpios.
Es importante llevar a tu hijo al odontopediatra al menos una vez al año, para controlar su salud bucal.
SALIDA DE LOS PRIMEROS DIENTES
La salida de los primeros dientes es aproximadamente a partir de los 6 meses de edad.
La parte de la encía donde está emergiendo el diente puede inflamarse y ponerse sensible.
Algunos bebés pueden experimentar irritabilidad, llanto, sueño y alimentación irregular, y dolor durante esta etapa del crecimiento.
Para aliviarlo, podemos colocar toallitas mojadas y frías enrolladas para que los niños puedan morder.
Un masaje suave y ligero puede darle mucho alivio a tu hijo: no olvidar primero lavarse las manos y luego masajear las áreas doloridas en la boca de tu bebé con tu dedo o nudillo.
Normalmente la salida de los dientes no ocasiona fiebre, pero si tu bebé presenta una dentición incómoda y con fiebre consultá con tu pediatra.
EXTRACCIONES
El odontopediatra puede indicar la extracción de un diente en un niño ante determinados casos como:
Caries avanzada.
Ortodoncia: para prevenir o corregir maloclusión (alineación anormal de los dientes y en la forma como encajan las piezas superiores e inferiores).
Traumatismo: resultado directo de un traumatismo agudo.
Pérdida: Diente extraído por su movilidad.
Enfermedad periodontal: absceso (infección con pus) periodontal (encías) y dolor.
Retención prolongada de los dientes primarios.
Los antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno, son recomendados para el manejo del dolor dental agudo después de 1 o más extracciones dentales y el manejo temporal del dolor e inflamación de muelas y por caries en niños.
BRUXISMO
El bruxismo es una actividad repetitiva de los músculos masticatorios y es común durante la infancia.
Se lo conoce como el acto de “rechinar” o “apretar” los dientes, que a veces va acompañado de un sonido de roce (especialmente durante el sueño) y en ocasiones éste puede ser fuerte y audible.
En los niños existen dos formas de bruxismo: el bruxismo despierto o de vigilia (BV) y el bruxismo del sueño (BS).
Tanto el BS como el BV comparten signos y síntomas como: inflamación, desgaste y/o fractura dentaria, sensibilidad/dolor dental, dolor en los músculos masticatorios o en la articulación temporomandibular (articulación que usamos al masticar), malestar y dolor de cabeza al despertar. Además, puede producir alteración en la calidad y propiedad de recuperación que tiene el sueño.
DOLOR MUSCULAR
DOLOR DE ESPALDA POR MOCHILA
Este tipo de dolor puede empezar durante la infancia y la adolescencia, y es un problema común en las primeras etapas de la vida.
El uso de mochilas pesadas puede ser una de estas causas ya que puede producir dolor muscular de hombros, cuello y zona baja de la columna (zona lumbar).
¿Cómo prevenirlo?
1) El peso de la mochila no debe superar el 10%-15% del peso corporal del niño o adolescente. Por Ejemplo: si el chico pesa 25 Kg, su mochila no debería pesar más de 2,5 Kg
2) El tamaño de la mochila no debería ser mayor al cuerpo del niño:
Si la altura de la mochila es mayor que el largo del torso toca la cabeza del niño e impide su movimiento.
Si las ruedas de la mochila son demasiado altas, el mango no queda bien adaptado, provocando un aumento de la tensión en los músculos de los hombros y la espalda.
3) Hábitos de vida saludables: mantener un peso adecuado, dieta equilibrada, buen descanso nocturno, hacer ejercicio físico y tratar de reducir el tiempo que los chicos permanecen sentados frente a pantallas (televisión, computadora, celulares, tablets).
DOLOR POR CRECIMIENTO
Son dolores musculares comunes, benignos y recurrentes en los niños de entre 3 y 6 años, que se presentan más comúnmente en las piernas.
1 de cada 3 chicos, puede sufrir dolores de crecimiento.
En la mayoría de los casos no es necesario un tratamiento específico para los dolores de crecimiento, sin embargo, el dolor nocturno no sólo puede ser una carga para los niños afectados, sino también para los padres, quienes a menudo también se ven afectados por los episodios nocturnos.
¿Cómo aliviarlo?
Si tu hijo tiene dolores del crecimiento, algunas medidas simples pueden ayudar a que el episodio pase rápidamente:
Masajear el área dolorida hasta que pase el dolor
Aplicar calor en la zona del dolor
Si no son suficientes, podemos ayudar a aliviar el dolor muscular por crecimiento con analgésicos y antiinflamatorios como el Ibuprofeno.
DOLOR DE CUELLO POR USO EXCESIVO DE DISPOSITIVOS ELECTRÓNICOS
Es una afección musculoesquelética relativamente nueva, que emerge en el marco del incremento en la frecuencia y tiempo de uso de celulares, acompañado por una flexión sostenida del cuello al utilizarlos.
Puede generar dolores musculares como dolor de cuello, hombros, brazos, espalda y dolor de cabeza.
El factor clave es mirar hacia abajo durante períodos prolongados de tiempo (por ejemplo, durante más de 10 minutos), con el cuello inclinado, al usar el celular. El peso de la cabeza sobre la columna aumenta cuando se flexiona hacia adelante: cuanto más lo hacemos, más aumenta la presión que se ejerce sobre el cuello.
¿Como prevenirlo?
Es importante una intervención temprana en lo referido a la educación postural.
Algunos consejos útiles son: tomar descansos frecuentes (por ejemplo, cada 15 - 20 minutos), evitar posturas estáticas prolongadas y colocar correctamente el dispositivo. Podemos usar un soporte para celular, permitiendo así que esté al mismo nivel de los ojos evitando la flexión del cuello y aliviar la presión sobre los hombros y la columna.
DOLOR POR DEPORTE
Para aliviar el dolor y la inflamación que pueden generarse por lesiones musculoesqueléticas (como esguinces, torceduras o golpes) hay estudios que demuestran que el ibuprofeno proporciona mayor alivio debido a su propiedad como analgésico y antiinflamatorio.
DOLOR DE GARGANTA
Al hablar de dolor de garganta nos referimos no sólo a dolor, sino también a la sensación de picazón o irritación en la garganta que empeora al tragar.
Suele ser el síntoma más importante de la "faringitis": inflamación de la garganta. Esta es una de las enfermedades más comunes en la infancia, teniendo una prevalencia estacional: aumenta en invierno y primavera.
La causa más frecuente es viral, como el resfrío común.
Las causas bacterianas se caracterizan por:
Ser más frecuentes en invierno y principios de la primavera
Afectar en mayor proporción a los chicos entre los 2 y 15 años
Tener comienzo brusco con: fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta
Presencia de ganglios aumentados de tamaño (submaxilares, cervicales)
No suele coincidir generalmente con rinitis acuosa, tos, disfonía, conjuntivitis o diarrea.
Asegurate de que beba abundantes líquidos frescos, sobre todo cuando tenga fiebre. Evitá darle jugo de naranja o pomelo, limonada y otras bebidas cítricas, que podrían irritarle la garganta.
Es importante la consulta con el pediatra ya que la faringitis estreptocócica requiere tratamiento antibiótico.
DOLOR DE CABEZA
Los dolores de cabeza más comunes en los niños son por estrés (tensional) o por una congestión. El dolor de cabeza tensional puede manifestarse como:
Una sensación de opresión en los músculos de la cabeza o el cuello.
Dolor leve o moderado en ambos lados de la cabeza.
Dolor que no empeora con la actividad física.
Dolor que no está acompañado de náuseas o vómitos, como suele suceder con la migraña.
Los niños más pequeños pueden dejar de jugar como lo hacían habitualmente, y querer dormir más.
Las cefaleas tensionales pueden durar desde 30 minutos a varios días.
Algunas medidas como el reposo, la buena hidratación, las compresas frías, una ducha o baño tibios, las siestas en una habitación oscura y los masajes en el cuello y la cabeza pueden ayudar a aliviarlos.